- Jubilaciones: ahogadas por el burocratismo
Benny Cruz Zapata/EnLíneaDIRECTA
Victoria, Tamaulipas.- Rosalío Bustamante Mata es el primer hombre que
en el sur de Tamaulipas ha tenido la profesión de enfermero; con el aval
que le dan 31 años ininterrumpidos de dedicar sus noches al servicio
médico de los demás, ahora clama por que le hagan justicia, declarándose
en huelga de hambre en la explanada del Instituto Mexicano del Seguro
Social en esta capital, en demanda que le hagan efectiva la jubilación
que por derecho le corresponde y que desde febrero del presente año esta
signada por el propio delegado Jesús Nader:
“Es aberrante, injusto que detrás de un escritorio se nos condene a
sufrir lo que ningún trabajador debería padecer, sin tomar en cuenta que
dejamos toda nuestra vida en el servicio médico hospitalario, ya que
como enfermeros nos toca velar la enfermedad de los pacientes, pues
estamos conscientes que sus familiares ponen su vida en nuestras manos,
con la camiseta bien puesta, en mi caso, si me pedían cinco daba diez,
ya que como hombre inmerso en una profesión en la que hace más de 30
años era casi exclusiva para mujeres, tuve que batallar para demostrar
que como hombres también teníamos la capacidad de atender a los enfermos
y apoyar a los doctores, todavía recuerdo que hubo compañeros que
fueron rechazados por ser hombres”.
Menciona que él fue el único que corrió con suerte y pronto pudo demostrar su convicción de servicio:
“En 31 años siempre he trabajado de noche, mi cuerpo se fue
acostumbrando a vivir de esta manera y nunca me queje, sobre todo porque
en los últimos años me toco atender el área de niños en la clínica del
IMSS de Madero, en donde además de cumplir con mi trabajo siempre he
tratado de estrechar lazos humanitarios con los familiares, dándoles
palabras de aliento cuando más lo necesitan, no hay nada más estimulante
que recibir un “gracias” y aunque hay gente que jamás se vuelve a ver,
la satisfacción del deber cumplido no se compara con nada, no tiene
precio”.
Por todo esto, desde julio del año pasado, cumpliendo los tiempos
legales para tramitar la jubilación, jamás imaginó lo que estaba por
vivir:
“Me queda claro que a los funcionarios que dirigen el IMSS les falta
humanizarse, ya que además de la crisis que afecta en todos los sentidos
se ha perdido la humanidad, no hay sensibilidad ni consideración para
quienes lo dirigen desde atrás del escritorio, sólo somos un número
de empleado y nada más; eso lo he comprobado desde que inicié el trámite
para mi jubilación, de lo cual ya va a ser un año y todavía no hay nada
en concreto”.
Enfatiza:
“Es una falta de respeto, una afectación de la dignidad, una impotencia
la que se siente ante una institución ahogada por el burocratismo, que
le apuesta a complicar las jubilaciones que postergan de tal manera a
que uno se muera o le pase algo”.
Por esto es que se ha puesto en huelga de hambre:
-He aprendido que sólo a través de la denuncia pública podemos alcanzar
la justicia, aunque hay compañeros que después de sufrir la burocracia
del IMSS han procedido a demandarlo, en mi caso además de presionar, es
hacer visible un grave problema que aqueja a otros compañeros.
Puntualiza que la huelga de hambre se llevar hasta las últimas consecuencias:
“Si el señor Nader me firmó los documentos en febrero y ya estamos en
junio y no sólo no se a cumplido sino que no se ven avances, mal
andamos”.
Cabe mencionar que esta protesta de Bustamante Mata, se dio los primeros días de febrero.
“No quiero más mentiras, una y otra vez anduve tocando puertas, viendo
gente, solicitando audiencias y nada conseguí, ya que el burocratismo
que impera en el IMSS es un verdadero infierno para quienes por
necesidad tenemos que pasar por él; fueron muchos trámites los
realizados hasta que se autorizó el retiro; lo que de poco me ha servido
pues sigo como desde el principio”.
Afirma que la huelga de hambre la sostendrá hasta que el IMSS cumpla con su jubilación:
“Sé que no soy el único pues hay muchos compañeros que están en las
mismas condiciones, y ojalá que se atrevan a hacer público lo que está
sucediendo”.
lunes, 10 de febrero de 2014
domingo, 9 de febrero de 2014
LA ENFERMERIA EN LA ACTUALIDAD
La Escuela de Enfermería de la UN se convierte en facultad
El cambio de denominación llega tras la adaptación de la diplomatura (3 años) a grado por Bolonia (4)
La Facultad de Enfermería de la universidad privada cuenta con 153 profesores y 375 estudiantes
MARCOS SÁNCHEZ . PAMPLONA Miércoles, 16 de febrero de 2011 - 04:00 h.
La Escuela de Enfermería de la Universidad de Navarra, que comenzó su andadura en 1954, se ha convertido en Facultad de Enfermería, denominación que ha sido aprobada por el Ministerio de Educación.
El cambio no supone ninguna modificación en el plan de estudios del grado de Enfermería, que comenzó el pasado curso 2009, cuando la escuela fue una de las primeras de España en adaptarse a Bolonia y pasar de tres años de estudios (como diplomatura) a cuatro (como grado).Mercedes Pérez Díez del Corral, antes directora de la escuela y ahora decana de la facultad, asegura que la evolución "cierra un proceso de equiparación de los estudios de Enfermería con el resto de las titulaciones". En este sentido, destaca que este desarrollo "es el que están siguiendo las demás universidades españolas que imparten Enfermería".
Por otro lado, Mercedes Pérez Díez del Corral adelanta que el próximo curso 2011-12 la Facultad de Enfermería de la Universidad de Navarra pondrá en marcha un nuevo programa de doctorado en Ciencias de la Enfermería y el máster de Enfermería en Cuidados Paliativos. Este segundo se suma al posgrado que ya imparte en Investigación y Rol Avanzado.
153 profesores
En la actualidad, la Facultad de Enfermería del centro privado cuenta con 375 estudiantes y 153 profesores. Estos últimos, de los que la mayoría compagina docencia con asistencia en la Clínica Universidad de Navarra, se dividen en dos departamentos: Enfermería comunitaria y materno-infantil, y Enfermería de la persona adulta. En ambos departamentos se llevan a cabo proyectos de investigación en líneas como la Ley de Dependencia, cuidados paliativos, salud de la población infantil, o apoyo de Enfermería a pacientes con cáncer y párkinson.
El 60% de los profesores son doctores, tratándose de uno de los porcentajes más altos entre las facultades y escuelas de Enfermería españolas. Sus tesis doctorales, defendidas en centros de Reino Unido y Estados Unidos, abordan ámbitos como la relación entre el profesional de la Enfermería y el paciente, la relación familiar y los procesos de envejecimiento o el tratamiento del tabaquismo en los estudiantes universitarios.
comentarios de los lectores (10)[ir al inicio de la noticia]
- Alumna 16/02/2011 22:34 h. Cuántos comentarios sin conocimiento de lo que se habla, por favor, primero conocer y después hablar... Yo soy estudiante de enfermería en la UNAV actualmente, y os aseguro que las cosas que se les puede criticar son prácticamente las mismas que a otros centros. Sin embargo, de las cosas buenas no habla nadie. L@s profesor@s tienen unos pedazo de currículum increíbles, te quedas pasmado de que personas de 30 y pocos años sean tan geniales y de cómo han aprovechado su vida profesional. Las cosas malas: La adaptación a Bolonia no ha sido bien planificada (aunque se está corrigiendo...). Sobran algunas asignaturas inútiles. Y algunas cosas que derivan del hecho de ser un centro privado... Lo de los chicos en la carrera ha cambiado, ahora sí hay. A mí también me parece fuerte que antes no los admitieran, pero ahora los hay y los tratan como a reyes, así que os podéis olvidar del tema o hablar en pasado. Los profesores con mentalidad arcaica, que son lo peor de todo, ya están extinguíendose, por suerte. Seguiría comentando pero ya me he extendido mucho...
- LAS COSAS CLARITAS QUE YA VALE DE VENDER LA MOTO 16/02/2011 11:47 h. Enfermería vive una eterna falacia: Se habla de ciencias de la enfermería cuando la enfermería NO ES UNA CIENCIA, ENFERMERÍA ES PURA TECNOLOGÍA, NO CIENCIA, PERO COMO TODA TECNOLOGÍA FUNDAMENTADA EN CONOCIMIENTO CIENTÍFICO. ENFERMERÍA NO TIENE UN CORPUS CIENTÍFICO PROPIO, sino que su conocimiento tecnológico de los cuidados generales y del conocimiento de otras ciencias.
- anonimus 16/02/2011 10:52 h. Julen, lee mejor la noticia... Supone un cambio, practicamente, de nombre... no que vayan a construir un nuevo edificio... De hecho, las clases se imparten en un edificio en el que tambien se dan clases de medicina, biologia, farmacia, quimica... e incluso al fondo del todo esta la escuela de idiomas.... No sé porque emitís tantos comentarios en contra d la Universidad de Navarra, ya que sin ella Pamplona se moriría de hambre... sino pregunta a cafeterias, papelerías, autoescuelas, pisos en alquiler...Navarra es lo q es gracias a la VW y a la Universidad de Navarra. Ir a la Universidad de Navarra es totalmente libre, nadie te obliga y en el momento en el que eliges estudiar alli sabes lo q te vas a encontrar sino, pues te vas a la UPNA o a cualquier otro centro educativo que comparta tus valores
- enfermera diplomada en la UN 16/02/2011 10:32 h. Digo: ¡¡¡ Qué mala baba tienes!! ¿No estarás frustrado por no haber estadiado en la Universidad de Navarra?. Casi seguro que sí. Su docencia es magnífica.
- Alberto 16/02/2011 10:11 h. Solo es para mujeres??? De eso no tenía ni idea...hay pocas cosas que me sorprendan en esta vida, pero esta me ha llegado al alma...menudo mundo!!
LA ENFERMERIA COMO PROFESION PARA UN HOMBRES
Profesiones Enfermería
además ayuda mucho en caso del cuidado de hombres enfermos
La Enfermería es la ciencia del cuidado de la salud del ser humano. Es una disciplina que en el último siglo y particularmente en los últimos años ha ido definiendo cada vez más sus funciones dentro de las ciencias de la salud. En España y Colombia existe otra profesión dentro de la Enfermería cuyas funciones complementan la labor de los enfermeros: el titulado técnico en cuidados auxiliares de enfermería, más conocido como auxiliar de enfermería.
EL PRIMER HOMBRE ENFERMERO
Fue el primer enfermero hombre; se pone en huelga de hambre
2 Jun 2009(07:25:16)
Fue el primer enfermero hombre; se pone en huelga de hambre
2 Jun 2009(07:25:16)
- Jubilaciones: ahogadas por el burocratismo
Benny Cruz Zapata/EnLíneaDIRECTA
Victoria, Tamaulipas.- Rosalío Bustamante Mata es el primer hombre que en el sur de Tamaulipas ha tenido la profesión de enfermero; con el aval que le dan 31 años ininterrumpidos de dedicar sus noches al servicio médico de los demás, ahora clama por que le hagan justicia, declarándose en huelga de hambre en la explanada del Instituto Mexicano del Seguro Social en esta capital, en demanda que le hagan efectiva la jubilación que por derecho le corresponde y que desde febrero del presente año esta signada por el propio delegado Jesús Nader:
“Es aberrante, injusto que detrás de un escritorio se nos condene a sufrir lo que ningún trabajador debería padecer, sin tomar en cuenta que dejamos toda nuestra vida en el servicio médico hospitalario, ya que como enfermeros nos toca velar la enfermedad de los pacientes, pues estamos conscientes que sus familiares ponen su vida en nuestras manos, con la camiseta bien puesta, en mi caso, si me pedían cinco daba diez, ya que como hombre inmerso en una profesión en la que hace más de 30 años era casi exclusiva para mujeres, tuve que batallar para demostrar que como hombres también teníamos la capacidad de atender a los enfermos y apoyar a los doctores, todavía recuerdo que hubo compañeros que fueron rechazados por ser hombres”.
Menciona que él fue el único que corrió con suerte y pronto pudo demostrar su convicción de servicio:
“En 31 años siempre he trabajado de noche, mi cuerpo se fue acostumbrando a vivir de esta manera y nunca me queje, sobre todo porque en los últimos años me toco atender el área de niños en la clínica del IMSS de Madero, en donde además de cumplir con mi trabajo siempre he tratado de estrechar lazos humanitarios con los familiares, dándoles palabras de aliento cuando más lo necesitan, no hay nada más estimulante que recibir un “gracias” y aunque hay gente que jamás se vuelve a ver, la satisfacción del deber cumplido no se compara con nada, no tiene precio”.
Por todo esto, desde julio del año pasado, cumpliendo los tiempos legales para tramitar la jubilación, jamás imaginó lo que estaba por vivir:
“Me queda claro que a los funcionarios que dirigen el IMSS les falta humanizarse, ya que además de la crisis que afecta en todos los sentidos se ha perdido la humanidad, no hay sensibilidad ni consideración para quienes lo dirigen desde atrás del escritorio, sólo somos un número de empleado y nada más; eso lo he comprobado desde que inicié el trámite para mi jubilación, de lo cual ya va a ser un año y todavía no hay nada en concreto”.
Enfatiza:
“Es una falta de respeto, una afectación de la dignidad, una impotencia la que se siente ante una institución ahogada por el burocratismo, que le apuesta a complicar las jubilaciones que postergan de tal manera a que uno se muera o le pase algo”.
Por esto es que se ha puesto en huelga de hambre:
-He aprendido que sólo a través de la denuncia pública podemos alcanzar la justicia, aunque hay compañeros que después de sufrir la burocracia del IMSS han procedido a demandarlo, en mi caso además de presionar, es hacer visible un grave problema que aqueja a otros compañeros.
Puntualiza que la huelga de hambre se llevar hasta las últimas consecuencias:
“Si el señor Nader me firmó los documentos en febrero y ya estamos en junio y no sólo no se a cumplido sino que no se ven avances, mal andamos”.
Cabe mencionar que esta protesta de Bustamante Mata, se dio los primeros días de febrero.
“No quiero más mentiras, una y otra vez anduve tocando puertas, viendo gente, solicitando audiencias y nada conseguí, ya que el burocratismo que impera en el IMSS es un verdadero infierno para quienes por necesidad tenemos que pasar por él; fueron muchos trámites los realizados hasta que se autorizó el retiro; lo que de poco me ha servido pues sigo como desde el principio”.
Afirma que la huelga de hambre la sostendrá hasta que el IMSS cumpla con su jubilación:
“Sé que no soy el único pues hay muchos compañeros que están en las mismas condiciones, y ojalá que se atrevan a hacer público lo que está sucediendo”.
Benny Cruz Zapata/EnLíneaDIRECTA
Victoria, Tamaulipas.- Rosalío Bustamante Mata es el primer hombre que en el sur de Tamaulipas ha tenido la profesión de enfermero; con el aval que le dan 31 años ininterrumpidos de dedicar sus noches al servicio médico de los demás, ahora clama por que le hagan justicia, declarándose en huelga de hambre en la explanada del Instituto Mexicano del Seguro Social en esta capital, en demanda que le hagan efectiva la jubilación que por derecho le corresponde y que desde febrero del presente año esta signada por el propio delegado Jesús Nader:
“Es aberrante, injusto que detrás de un escritorio se nos condene a sufrir lo que ningún trabajador debería padecer, sin tomar en cuenta que dejamos toda nuestra vida en el servicio médico hospitalario, ya que como enfermeros nos toca velar la enfermedad de los pacientes, pues estamos conscientes que sus familiares ponen su vida en nuestras manos, con la camiseta bien puesta, en mi caso, si me pedían cinco daba diez, ya que como hombre inmerso en una profesión en la que hace más de 30 años era casi exclusiva para mujeres, tuve que batallar para demostrar que como hombres también teníamos la capacidad de atender a los enfermos y apoyar a los doctores, todavía recuerdo que hubo compañeros que fueron rechazados por ser hombres”.
Menciona que él fue el único que corrió con suerte y pronto pudo demostrar su convicción de servicio:
“En 31 años siempre he trabajado de noche, mi cuerpo se fue acostumbrando a vivir de esta manera y nunca me queje, sobre todo porque en los últimos años me toco atender el área de niños en la clínica del IMSS de Madero, en donde además de cumplir con mi trabajo siempre he tratado de estrechar lazos humanitarios con los familiares, dándoles palabras de aliento cuando más lo necesitan, no hay nada más estimulante que recibir un “gracias” y aunque hay gente que jamás se vuelve a ver, la satisfacción del deber cumplido no se compara con nada, no tiene precio”.
Por todo esto, desde julio del año pasado, cumpliendo los tiempos legales para tramitar la jubilación, jamás imaginó lo que estaba por vivir:
“Me queda claro que a los funcionarios que dirigen el IMSS les falta humanizarse, ya que además de la crisis que afecta en todos los sentidos se ha perdido la humanidad, no hay sensibilidad ni consideración para quienes lo dirigen desde atrás del escritorio, sólo somos un número de empleado y nada más; eso lo he comprobado desde que inicié el trámite para mi jubilación, de lo cual ya va a ser un año y todavía no hay nada en concreto”.
Enfatiza:
“Es una falta de respeto, una afectación de la dignidad, una impotencia la que se siente ante una institución ahogada por el burocratismo, que le apuesta a complicar las jubilaciones que postergan de tal manera a que uno se muera o le pase algo”.
Por esto es que se ha puesto en huelga de hambre:
-He aprendido que sólo a través de la denuncia pública podemos alcanzar la justicia, aunque hay compañeros que después de sufrir la burocracia del IMSS han procedido a demandarlo, en mi caso además de presionar, es hacer visible un grave problema que aqueja a otros compañeros.
Puntualiza que la huelga de hambre se llevar hasta las últimas consecuencias:
“Si el señor Nader me firmó los documentos en febrero y ya estamos en junio y no sólo no se a cumplido sino que no se ven avances, mal andamos”.
Cabe mencionar que esta protesta de Bustamante Mata, se dio los primeros días de febrero.
“No quiero más mentiras, una y otra vez anduve tocando puertas, viendo gente, solicitando audiencias y nada conseguí, ya que el burocratismo que impera en el IMSS es un verdadero infierno para quienes por necesidad tenemos que pasar por él; fueron muchos trámites los realizados hasta que se autorizó el retiro; lo que de poco me ha servido pues sigo como desde el principio”.
Afirma que la huelga de hambre la sostendrá hasta que el IMSS cumpla con su jubilación:
“Sé que no soy el único pues hay muchos compañeros que están en las mismas condiciones, y ojalá que se atrevan a hacer público lo que está sucediendo”.
Fue el primer enfermero hombre; se pone en huelga de hambre
2 Jun 2009(07:25:16)
- Jubilaciones: ahogadas por el burocratismo
Benny Cruz Zapata/EnLíneaDIRECTA
Victoria, Tamaulipas.- Rosalío Bustamante Mata es el primer hombre que en el sur de Tamaulipas ha tenido la profesión de enfermero; con el aval que le dan 31 años ininterrumpidos de dedicar sus noches al servicio médico de los demás, ahora clama por que le hagan justicia, declarándose en huelga de hambre en la explanada del Instituto Mexicano del Seguro Social en esta capital, en demanda que le hagan efectiva la jubilación que por derecho le corresponde y que desde febrero del presente año esta signada por el propio delegado Jesús Nader:
“Es aberrante, injusto que detrás de un escritorio se nos condene a sufrir lo que ningún trabajador debería padecer, sin tomar en cuenta que dejamos toda nuestra vida en el servicio médico hospitalario, ya que como enfermeros nos toca velar la enfermedad de los pacientes, pues estamos conscientes que sus familiares ponen su vida en nuestras manos, con la camiseta bien puesta, en mi caso, si me pedían cinco daba diez, ya que como hombre inmerso en una profesión en la que hace más de 30 años era casi exclusiva para mujeres, tuve que batallar para demostrar que como hombres también teníamos la capacidad de atender a los enfermos y apoyar a los doctores, todavía recuerdo que hubo compañeros que fueron rechazados por ser hombres”.
Menciona que él fue el único que corrió con suerte y pronto pudo demostrar su convicción de servicio:
“En 31 años siempre he trabajado de noche, mi cuerpo se fue acostumbrando a vivir de esta manera y nunca me queje, sobre todo porque en los últimos años me toco atender el área de niños en la clínica del IMSS de Madero, en donde además de cumplir con mi trabajo siempre he tratado de estrechar lazos humanitarios con los familiares, dándoles palabras de aliento cuando más lo necesitan, no hay nada más estimulante que recibir un “gracias” y aunque hay gente que jamás se vuelve a ver, la satisfacción del deber cumplido no se compara con nada, no tiene precio”.
Por todo esto, desde julio del año pasado, cumpliendo los tiempos legales para tramitar la jubilación, jamás imaginó lo que estaba por vivir:
“Me queda claro que a los funcionarios que dirigen el IMSS les falta humanizarse, ya que además de la crisis que afecta en todos los sentidos se ha perdido la humanidad, no hay sensibilidad ni consideración para quienes lo dirigen desde atrás del escritorio, sólo somos un número de empleado y nada más; eso lo he comprobado desde que inicié el trámite para mi jubilación, de lo cual ya va a ser un año y todavía no hay nada en concreto”.
Enfatiza:
“Es una falta de respeto, una afectación de la dignidad, una impotencia la que se siente ante una institución ahogada por el burocratismo, que le apuesta a complicar las jubilaciones que postergan de tal manera a que uno se muera o le pase algo”.
Por esto es que se ha puesto en huelga de hambre:
-He aprendido que sólo a través de la denuncia pública podemos alcanzar la justicia, aunque hay compañeros que después de sufrir la burocracia del IMSS han procedido a demandarlo, en mi caso además de presionar, es hacer visible un grave problema que aqueja a otros compañeros.
Puntualiza que la huelga de hambre se llevar hasta las últimas consecuencias:
“Si el señor Nader me firmó los documentos en febrero y ya estamos en junio y no sólo no se a cumplido sino que no se ven avances, mal andamos”.
Cabe mencionar que esta protesta de Bustamante Mata, se dio los primeros días de febrero.
“No quiero más mentiras, una y otra vez anduve tocando puertas, viendo gente, solicitando audiencias y nada conseguí, ya que el burocratismo que impera en el IMSS es un verdadero infierno para quienes por necesidad tenemos que pasar por él; fueron muchos trámites los realizados hasta que se autorizó el retiro; lo que de poco me ha servido pues sigo como desde el principio”.
Afirma que la huelga de hambre la sostendrá hasta que el IMSS cumpla con su jubilación:
“Sé que no soy el único pues hay muchos compañeros que están en las mismas condiciones, y ojalá que se atrevan a hacer público lo que está sucediendo”.
Benny Cruz Zapata/EnLíneaDIRECTA
Victoria, Tamaulipas.- Rosalío Bustamante Mata es el primer hombre que en el sur de Tamaulipas ha tenido la profesión de enfermero; con el aval que le dan 31 años ininterrumpidos de dedicar sus noches al servicio médico de los demás, ahora clama por que le hagan justicia, declarándose en huelga de hambre en la explanada del Instituto Mexicano del Seguro Social en esta capital, en demanda que le hagan efectiva la jubilación que por derecho le corresponde y que desde febrero del presente año esta signada por el propio delegado Jesús Nader:
“Es aberrante, injusto que detrás de un escritorio se nos condene a sufrir lo que ningún trabajador debería padecer, sin tomar en cuenta que dejamos toda nuestra vida en el servicio médico hospitalario, ya que como enfermeros nos toca velar la enfermedad de los pacientes, pues estamos conscientes que sus familiares ponen su vida en nuestras manos, con la camiseta bien puesta, en mi caso, si me pedían cinco daba diez, ya que como hombre inmerso en una profesión en la que hace más de 30 años era casi exclusiva para mujeres, tuve que batallar para demostrar que como hombres también teníamos la capacidad de atender a los enfermos y apoyar a los doctores, todavía recuerdo que hubo compañeros que fueron rechazados por ser hombres”.
Menciona que él fue el único que corrió con suerte y pronto pudo demostrar su convicción de servicio:
“En 31 años siempre he trabajado de noche, mi cuerpo se fue acostumbrando a vivir de esta manera y nunca me queje, sobre todo porque en los últimos años me toco atender el área de niños en la clínica del IMSS de Madero, en donde además de cumplir con mi trabajo siempre he tratado de estrechar lazos humanitarios con los familiares, dándoles palabras de aliento cuando más lo necesitan, no hay nada más estimulante que recibir un “gracias” y aunque hay gente que jamás se vuelve a ver, la satisfacción del deber cumplido no se compara con nada, no tiene precio”.
Por todo esto, desde julio del año pasado, cumpliendo los tiempos legales para tramitar la jubilación, jamás imaginó lo que estaba por vivir:
“Me queda claro que a los funcionarios que dirigen el IMSS les falta humanizarse, ya que además de la crisis que afecta en todos los sentidos se ha perdido la humanidad, no hay sensibilidad ni consideración para quienes lo dirigen desde atrás del escritorio, sólo somos un número de empleado y nada más; eso lo he comprobado desde que inicié el trámite para mi jubilación, de lo cual ya va a ser un año y todavía no hay nada en concreto”.
Enfatiza:
“Es una falta de respeto, una afectación de la dignidad, una impotencia la que se siente ante una institución ahogada por el burocratismo, que le apuesta a complicar las jubilaciones que postergan de tal manera a que uno se muera o le pase algo”.
Por esto es que se ha puesto en huelga de hambre:
-He aprendido que sólo a través de la denuncia pública podemos alcanzar la justicia, aunque hay compañeros que después de sufrir la burocracia del IMSS han procedido a demandarlo, en mi caso además de presionar, es hacer visible un grave problema que aqueja a otros compañeros.
Puntualiza que la huelga de hambre se llevar hasta las últimas consecuencias:
“Si el señor Nader me firmó los documentos en febrero y ya estamos en junio y no sólo no se a cumplido sino que no se ven avances, mal andamos”.
Cabe mencionar que esta protesta de Bustamante Mata, se dio los primeros días de febrero.
“No quiero más mentiras, una y otra vez anduve tocando puertas, viendo gente, solicitando audiencias y nada conseguí, ya que el burocratismo que impera en el IMSS es un verdadero infierno para quienes por necesidad tenemos que pasar por él; fueron muchos trámites los realizados hasta que se autorizó el retiro; lo que de poco me ha servido pues sigo como desde el principio”.
Afirma que la huelga de hambre la sostendrá hasta que el IMSS cumpla con su jubilación:
“Sé que no soy el único pues hay muchos compañeros que están en las mismas condiciones, y ojalá que se atrevan a hacer público lo que está sucediendo”.
Fue el primer enfermero hombre; se pone en huelga de hambre
2 Jun 2009(07:25:16)
- Jubilaciones: ahogadas por el burocratismo
Benny Cruz Zapata/EnLíneaDIRECTA
Victoria, Tamaulipas.- Rosalío Bustamante Mata es el primer hombre que en el sur de Tamaulipas ha tenido la profesión de enfermero; con el aval que le dan 31 años ininterrumpidos de dedicar sus noches al servicio médico de los demás, ahora clama por que le hagan justicia, declarándose en huelga de hambre en la explanada del Instituto Mexicano del Seguro Social en esta capital, en demanda que le hagan efectiva la jubilación que por derecho le corresponde y que desde febrero del presente año esta signada por el propio delegado Jesús Nader:
“Es aberrante, injusto que detrás de un escritorio se nos condene a sufrir lo que ningún trabajador debería padecer, sin tomar en cuenta que dejamos toda nuestra vida en el servicio médico hospitalario, ya que como enfermeros nos toca velar la enfermedad de los pacientes, pues estamos conscientes que sus familiares ponen su vida en nuestras manos, con la camiseta bien puesta, en mi caso, si me pedían cinco daba diez, ya que como hombre inmerso en una profesión en la que hace más de 30 años era casi exclusiva para mujeres, tuve que batallar para demostrar que como hombres también teníamos la capacidad de atender a los enfermos y apoyar a los doctores, todavía recuerdo que hubo compañeros que fueron rechazados por ser hombres”.
Menciona que él fue el único que corrió con suerte y pronto pudo demostrar su convicción de servicio:
“En 31 años siempre he trabajado de noche, mi cuerpo se fue acostumbrando a vivir de esta manera y nunca me queje, sobre todo porque en los últimos años me toco atender el área de niños en la clínica del IMSS de Madero, en donde además de cumplir con mi trabajo siempre he tratado de estrechar lazos humanitarios con los familiares, dándoles palabras de aliento cuando más lo necesitan, no hay nada más estimulante que recibir un “gracias” y aunque hay gente que jamás se vuelve a ver, la satisfacción del deber cumplido no se compara con nada, no tiene precio”.
Por todo esto, desde julio del año pasado, cumpliendo los tiempos legales para tramitar la jubilación, jamás imaginó lo que estaba por vivir:
“Me queda claro que a los funcionarios que dirigen el IMSS les falta humanizarse, ya que además de la crisis que afecta en todos los sentidos se ha perdido la humanidad, no hay sensibilidad ni consideración para quienes lo dirigen desde atrás del escritorio, sólo somos un número de empleado y nada más; eso lo he comprobado desde que inicié el trámite para mi jubilación, de lo cual ya va a ser un año y todavía no hay nada en concreto”.
Enfatiza:
“Es una falta de respeto, una afectación de la dignidad, una impotencia la que se siente ante una institución ahogada por el burocratismo, que le apuesta a complicar las jubilaciones que postergan de tal manera a que uno se muera o le pase algo”.
Por esto es que se ha puesto en huelga de hambre:
-He aprendido que sólo a través de la denuncia pública podemos alcanzar la justicia, aunque hay compañeros que después de sufrir la burocracia del IMSS han procedido a demandarlo, en mi caso además de presionar, es hacer visible un grave problema que aqueja a otros compañeros.
Puntualiza que la huelga de hambre se llevar hasta las últimas consecuencias:
“Si el señor Nader me firmó los documentos en febrero y ya estamos en junio y no sólo no se a cumplido sino que no se ven avances, mal andamos”.
Cabe mencionar que esta protesta de Bustamante Mata, se dio los primeros días de febrero.
“No quiero más mentiras, una y otra vez anduve tocando puertas, viendo gente, solicitando audiencias y nada conseguí, ya que el burocratismo que impera en el IMSS es un verdadero infierno para quienes por necesidad tenemos que pasar por él; fueron muchos trámites los realizados hasta que se autorizó el retiro; lo que de poco me ha servido pues sigo como desde el principio”.
Afirma que la huelga de hambre la sostendrá hasta que el IMSS cumpla con su jubilación:
“Sé que no soy el único pues hay muchos compañeros que están en las mismas condiciones, y ojalá que se atrevan a hacer público lo que está sucediendo”.
Benny Cruz Zapata/EnLíneaDIRECTA
Victoria, Tamaulipas.- Rosalío Bustamante Mata es el primer hombre que en el sur de Tamaulipas ha tenido la profesión de enfermero; con el aval que le dan 31 años ininterrumpidos de dedicar sus noches al servicio médico de los demás, ahora clama por que le hagan justicia, declarándose en huelga de hambre en la explanada del Instituto Mexicano del Seguro Social en esta capital, en demanda que le hagan efectiva la jubilación que por derecho le corresponde y que desde febrero del presente año esta signada por el propio delegado Jesús Nader:
“Es aberrante, injusto que detrás de un escritorio se nos condene a sufrir lo que ningún trabajador debería padecer, sin tomar en cuenta que dejamos toda nuestra vida en el servicio médico hospitalario, ya que como enfermeros nos toca velar la enfermedad de los pacientes, pues estamos conscientes que sus familiares ponen su vida en nuestras manos, con la camiseta bien puesta, en mi caso, si me pedían cinco daba diez, ya que como hombre inmerso en una profesión en la que hace más de 30 años era casi exclusiva para mujeres, tuve que batallar para demostrar que como hombres también teníamos la capacidad de atender a los enfermos y apoyar a los doctores, todavía recuerdo que hubo compañeros que fueron rechazados por ser hombres”.
Menciona que él fue el único que corrió con suerte y pronto pudo demostrar su convicción de servicio:
“En 31 años siempre he trabajado de noche, mi cuerpo se fue acostumbrando a vivir de esta manera y nunca me queje, sobre todo porque en los últimos años me toco atender el área de niños en la clínica del IMSS de Madero, en donde además de cumplir con mi trabajo siempre he tratado de estrechar lazos humanitarios con los familiares, dándoles palabras de aliento cuando más lo necesitan, no hay nada más estimulante que recibir un “gracias” y aunque hay gente que jamás se vuelve a ver, la satisfacción del deber cumplido no se compara con nada, no tiene precio”.
Por todo esto, desde julio del año pasado, cumpliendo los tiempos legales para tramitar la jubilación, jamás imaginó lo que estaba por vivir:
“Me queda claro que a los funcionarios que dirigen el IMSS les falta humanizarse, ya que además de la crisis que afecta en todos los sentidos se ha perdido la humanidad, no hay sensibilidad ni consideración para quienes lo dirigen desde atrás del escritorio, sólo somos un número de empleado y nada más; eso lo he comprobado desde que inicié el trámite para mi jubilación, de lo cual ya va a ser un año y todavía no hay nada en concreto”.
Enfatiza:
“Es una falta de respeto, una afectación de la dignidad, una impotencia la que se siente ante una institución ahogada por el burocratismo, que le apuesta a complicar las jubilaciones que postergan de tal manera a que uno se muera o le pase algo”.
Por esto es que se ha puesto en huelga de hambre:
-He aprendido que sólo a través de la denuncia pública podemos alcanzar la justicia, aunque hay compañeros que después de sufrir la burocracia del IMSS han procedido a demandarlo, en mi caso además de presionar, es hacer visible un grave problema que aqueja a otros compañeros.
Puntualiza que la huelga de hambre se llevar hasta las últimas consecuencias:
“Si el señor Nader me firmó los documentos en febrero y ya estamos en junio y no sólo no se a cumplido sino que no se ven avances, mal andamos”.
Cabe mencionar que esta protesta de Bustamante Mata, se dio los primeros días de febrero.
“No quiero más mentiras, una y otra vez anduve tocando puertas, viendo gente, solicitando audiencias y nada conseguí, ya que el burocratismo que impera en el IMSS es un verdadero infierno para quienes por necesidad tenemos que pasar por él; fueron muchos trámites los realizados hasta que se autorizó el retiro; lo que de poco me ha servido pues sigo como desde el principio”.
Afirma que la huelga de hambre la sostendrá hasta que el IMSS cumpla con su jubilación:
“Sé que no soy el único pues hay muchos compañeros que están en las mismas condiciones, y ojalá que se atrevan a hacer público lo que está sucediendo”.
HISTORIA DE LA ENFERMERIA
Florence Nightingale: La creadora de la enfermería
Hubo
un tiempo en el que el noble oficio de enfermera no tenía el respeto ni
la valoración social que ahora tiene. A mediados del siglo XIX, ser
enfermera era poco más o menos que pertenecer a una clase social muy
baja, se decía que eran “ayudantes de poca monta” y se decía que estaban
ahí porque no tenían otra cosa que hacer en la vida.
Esto
cambio a mediados del siglo XIX con la irrupción de una mujer
intrépida, valiente, una mujer que dio un vuelco a todo, para elevar la
enfermería como el dignísimo oficio que hoy conocemos.
Florence Nightingale nació en la ciudad italiana de Florencia el 12 de mayo de 1820.
Sus padres eran un matrimonio muy culto, bien preparado, bien cultivado
y con cierto desahogo económico. Sus padres como viaje de bodas
estuvieron viajando por Europa durante 2 años (hay nacieron sus dos hijas: Partenope y Florence), hasta que se acomodaron en Inglaterra, y, allí, en una casa magnífica vivieron unos veranos felicísimos…
Después de pasar las hijas por el estudio básico con las institutrices, su padre cogió la tutela de ambas y empezó a inculcarles el amor por el estudio, por la lectura de los “clásicos”, y por las matemáticas (disciplina esta que embriagó a Florence). Eso era lo que ella quería ser: Matemática…En 1837 cuando Florence tenía 17 años de edad, cuentan que sintió la “llamada de Dios” (ella siempre afirmó que Dios la había elegido para ser soltera), y a partir de ese día decidió entregarse de lleno por los demás…
En
1840, con 20 años, cuando la sociedad de entonces casi obligaba a las
jóvenes a las tareas domésticas, le dijo a sus padres que su intención
era estudiar Ciencias Exactas. La madre no quería porque “no era propio de una dama victoriana”, pero se “alió” con su padre y, al fin, consiguió el permiso para estudiar Matemáticas.
Florence se convirtió en una alumna aventajada y aprendió todo lo que había que saber sobre la Matemática y la Estadística. Y 5 años después cuando su madre aún no se había recuperado del “disgusto”, Florence
reunió a sus padres y le dijo que no quería ya ser matemática, que su
sueño era ser enfermera… A la madre casi le da un infarto, su hija de
alta alcurnia perteneciendo a un estrato social tan bajo; no se lo podía
creer.
Pero la terquedad de Florence de nuevo venció, y en un viaje de placer por Egipto, descubrió que en las escasas salas hospitalarias que había en Alejandría,
además de por su falta de higiene, la asepsia brillaba por su ausencia,
y desde ese año, 1849, se entregó a aprender todo lo que pudiera sobre la Enfermeria.
Estuvo viajando por todos lados, visitando instituciones médicas, para ver in situ, como se realizaban curas, como se atendía a los enfermos… y ya intuía que además de las curas físicas, la atención psicológica sería fundamental para el paciente (dar la mano a un paciente, decirle que pronto estaría con los suyos...).En 1850 volvió a su país, y cogió el cargo de superintendente (sin remuneración) de un centro médico que atendía solamente a “damas”. Y allí estuvo un año, hasta que estalló con virulencia la famosa Guerra de Crimea… Miles de ingleses padecían en torno a Sebastopol donde se libraba una cruenta batalla, y Florence constato por The Times que la situación de los enfermos era más que lamentable. Se puso “manos a la obra” y convocó a cuantas mujeres quisieran colaborar en el reto de ayudar a los moribundos en el frente, y 38 mujeres se alistaron voluntarias. Primero viajaron a Turquía en 1854, y, en un arrabal levantó un pequeño campamento hospitalario donde cientos de soldados llegaban cada día. Florece lloraba de amargura, porque la falta de asepsia aumentaba las víctimas debido a las infecciones…
Y es en todo este “descontrol”, donde sale su sapiencia matemática y estadística
y, empieza a apuntar en pequeñas pizarras las circunstancias que
afectaban a cada soldado. Anima a sus enfermeras y todas hacen lo mismo.
Es la primera vez que se realizan cuadros, estadísticas, gráficos…
Logra colocar agua potable en los hospitales, de su propio dinero sale a
los mercadillos y compra fruta y verdura fresca, y la situación de los
soldados empieza a mejorar.
Gracias a sus estadísticas, pudo comprobar que en un solo mes habían muerto más de 3.000 soldados, pero para su sorpresa se comprobó que solo 60 o 70
habían muerto por las heridas del combate. El resto fue por infecciones
y enfermedades. El dato era más que esclarecedor. Un mes después, la
mortandad había descendido en un 60%. Años después, según los especialistas médicos, la actuación de Florence y sus “chicas” consiguió salvar la vida de más de 5.000 soldados ingleses.
Finalizó la guerra y volvieron a Inglaterra, donde recibieron no pocos reconocimientos sociales. Fueron aclamadas. Había nacido la enfermería moderna.
La desgracia quizo que Florence contrajera una enfermedad en Crimea que la postro en la cama el resto de su vida y la dejo ciega, pero aun así saco fuerzas para crear la institución Nightingale
para formar enfermeras profesionales. Publicó a lo largo de su vida mas
de 200 libros sobre enfermería y hospitales, que se convirtieron en
auténticos manuales para las futuras enfermeras.
Una mujer que alzó su voz, y que, gracias a su inteligencia y tenacidad, le debemos mucho hoy en día. Cuantas vidas se habrán salvado gracias a su legado….
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